sábado, 1 de febrero de 2014

"Consejos de Bahauddin Naqshband."







Consejos de Bahauddin Naqshband.

Tú quieres ser llenado. Pero algo que esta lleno primero tiene que vaciarse. Vacíate para que puedas llenarte adecuadamente con el cumplimiento de estos consejos, que puedes realizar como deberes hacia ti mismo.

PRIMERO:
Nunca sigas ningún impulso para enseñar, sin importar lo fuerte que pudiera ser. El mandato para enseñar no se siente como un impulso.

SEGUNDO:
Nunca confíes en lo que tu crees que son experiencias internas, porque solo cuando las sobrepases alcanzaras el conocimiento. Ellas están allí para engañarte.

TERCERO:
Nunca viajes en busca del conocimiento a menos que seas enviado. El deseo de viajar para aprender es una prueba, no una orden.

CUARTO:
Nunca confíes en la creencia de que un hombre o una comunidad es la suprema, porque este sentimiento es una convicción, no una realidad. Debes progresar más allá de la convicción, y llegar a la realidad.

QUINTO:
Nunca permitas que te hiera lo que imaginas que es la crítica del maestro, ni te permitas permanecer halagado por un elogio. Estos sentimientos son barreras en tu camino, no conductores de el.

SEXTO:
Nunc a imites o sigas a un hombre humilde que además sea mezquino con las cosas materiales; semejante hombre se esta enorgulleciendo de las cosas materiales. Si eres mezquino, practica la generosidad como un correctivo, no como una virtud.

SEPTIMO:
Prepárate para descubrir que todas las creencias que provenían de tu medio ambiente eran secundarias, incluso aunque una vez te fuesen de mucha utilidad. Pueden convertirse en inútiles y en verdaderas trampas.

OCTAVO:
Prepárate para descubrir que ciertas creencias son verdaderas, pero que su significado e interpretación pueden variar de acuerdo con tu etapa en el viaje, haciéndolas parecer contradictorias para aquellos que no están en el Sendero.

NOVENO:
Recuerda que, al principio, la percepción y la iluminación no serán de tal índole que puedas decir de ellas:
Esto es percepción o Esto es iluminación.

DECIMO:
Nunca te permitas medir todas las cosas con la misma medida de tiempo. Una cosa tiene que anteceder a la otra.

UNDECIMO:
Si le das demasiada importancia al hombre, pensaras en una forma desproporcionada acerca de la actividad. Si piensas demasiado sobre ti mismo, pensaras erróneamente acerca del hombre. Si le das demasiada importancia a los libros, no estarás pensando correctamente sobre otras cosas. Utiliza cada uno como correctivo para los otros.

DUODECIMO:
No confíes en tu propia opinión cuando creas que necesitas libros y no ejercicios. Confía menos en tu creencia cuando pienses que necesitas ejercicios y no libros.

DECIMOTERCERO:
Cuando te consideres un discípulo, recuerda que esta es una etapa que asumes para poder descubrir cual es tu verdadera distancia en cuanto a tu maestro. No es una etapa que puedas medir, como lo lejos que estas de un edificio.

DECIMOCUARTO:
Cuando te sientas menos interesado en seguir el Camino en que has entrado, este puede ser el momento en que sea más apropiado para ti. Si imaginas que no deberías continuar, no es porque no estés convencido o tengas dudas; es porque estas fallando en la prueba. Siempre tendrás dudas, pero solo las descubrirás en los momentos que tu debilidad aproveche para señalarlas.

DECIMOQUINTO:
No puedes desterrar la duda. La duda desaparece cuando desaparecen la duda y la creencia tal como te fueron enseñadas. Si renuncias a un sendero, es porque estabas esperando convicción de el. Buscas convicción, no autoconocimiento.

DECIMOSEXTO:
No estes pensando si vas a ponerte o no en las manos de un maestro. Siempre estas en sus manos. Es mas bien una cuestión de si el puede ayudarte a que te ayudes a ti mismo, ya que tu tienes pocos medios para hacerlo. Discutir si uno confía o no es señal de que uno no quiere confiar en modo alguno, y, por lo tanto, es aun incapaz de ello. Creer que uno puede confiar es una creencia falsa. Si te preguntas ¿Puedo confiar?, realmente te estas preguntando; ¿Puedo desarrollar una opinión suficientemente fuerte que me agrade?.

DECIMOSEPTIMO:
Nunca confundas adiestramiento con habilidad. Si no puedes evitar ser lo que la gente llama bueno o sobrio, eres como la caña afilada que no puede evitar escribir si la empujan.

DECIMOCTAVO:
Cuando has observado o sentido emoción, corrige esto recordando que las emociones las sienten con la misma intensidad gentes con creencias completamente distintas. Por lo tanto, si imaginas que esta experiencia – la emoción – es noble o sublime, ¿Por qué no crees también que el dolor de estomago es un estado elevado?

DECIMONOVENO:
Si un maestro te estimula, no esta tratando de atarte a el. Mas bien esta tratando de mostrarte lo fácilmente que puede atraerte. Si te desalienta, la lección es que estas a merced del desaliento.

VIGESIMO:
La comprensión y el conocimiento son sensaciones completamente diferentes en el reino de la Verdad a como son en el reino de la sociedad. Cualquier cosa que tu comprendas de un modo ordinario acerca del Sendero, no es comprensión en el Sendero, sino suposición externa acerca del Sendero, común entre los imitadores inconscientes.

Del libro "Pensadores de Oriente".
Autor: Idries Shah.

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